El uso de ultrasonidos para luchar contra el fouling (la proliferación de incrustaciones) en embarcaciones está ganando terreno frente a otras alternativas. La empresa española Toscana ha ideado este completo artilugio que, sin tocar el casco ni las hélices de la embarcación, los libera de algas y crustáceos como el caracolillo.

Tal y como informa la empresa Toscano, DUMO Algacleaner Marina ACM supone un importante cambio en el mantenimiento de los barcos, al tratarse de un equipo de fácil instalación y mantenimiento reducido, eficaz contra la fauna que anida en el casco del barco.

Su aplicación reduce la necesidad de mantenimiento del casco de la embarcación fuera del agua, evitando alzamientos, tareas de limpieza y labores de mantenimiento de pintura anti incrustaciones. El uso de este aparato también mejora el rendimiento del casco, su velocidad y maniobrabilidad.

Entre otras ventajas, no necesita modificar estructuralmente el casco del barco para su instalación. Se fija mediante un cabo a la cubierta del barco mientras está atracado. Además es respetuoso con el medio ambiente ya que no utiliza productos químicos. Un estudio realizado por la Universidad de Huelva constata que el uso de este sistema no produce alteraciones en instalaciones acuiculturas para especies de macro invertebrados.

Precisamente, el respeto hacia el medio ambiente es una de las características más valoradas de este sistema. Desde que en 2008 la Organización Marítima Internacional (IMO) exigiera la erradicación definitiva del uso del TBT, una sustancia sumamente perjudicial para el medio ambiente y tóxica para organismos invertebrados, los fabricantes de pinturas no han dejado de investigar e introducir nuevos productos en el mercado. Sin embargo, los sistemas que experimentan con los ultrasonidos están en el camino de convertirse en la mejor alternativa.

El DUMO ACM consta de un emisor ultrasónico de alta eficiencia de transmisión, unido a un flotador para afrontar la obra viva de las embarcaciones; un generador ultrasónico alimentado por 115/230 V 130 W que se puede situar en el muelle, pantalán o en el interior del barco, y 30 metros de cable que conectan el equipo emisor y el equipo generador.

El emisor se instala de forma sencilla en la línea de proa de la embarcación y conecta con el equipo de control a una toma de corriente estándar. El generador emite pulsos de diversas frecuencias que causan daño en los órganos internos de algas y moluscos, vacuola y membrana celular.

Estos órganos son frágiles ante cambios rápidos de presión y su debilitación inhibe el crecimiento y las funciones vitales de estos organismos. Una vez activado, la efectividad dependerá de las condiciones ambientales, nutrientes del agua, forma del casco, así como otras variables biológicas.

Los métodos para combatir el fouling basados en ultrasonidos pueden ser utilizados tanto en agua dulce como en agua salada.

El velero clásico Hispania es uno de los barcos que utiliza el sistema en su amarre desde que comenzaron a realizarse los primeros test de prueba. José Francisco Rábade, presidente de la Fundación Isla Ebusitana, ha confirmado que han podido comprobar que el sistema funciona y que las algas y el caracolillo que se adhiere al casco eran prácticamente inexistente después de que el barco estuviera amarrado y conectado al emisor durante diez meses, justo antes de competir en el XXI Trofeo Illes Balears Clàssics.